Una de las consecuencias negativas cuando una comunidad está mal gestionada o administrada incorrectamente, es que el valor de sus viviendas se vea depreciado, ya sea porque no se hagan los mantenimientos o las reformas necesarias en las zonas comunes, o bien, porque los gestores no son profesionales cualificados capaces de proporcionar las cuentas claras. En nuestra oficina todos nuestros canales de comunicación están a su disposición: teléfono, SMS, whatsapp, correo electrónico o desde nuestra propia página web para que nos puedan informar de cualquier avería, reparación o contingencia que precise de una actuación inmediata. Buscamos en todo momento el trato cercano y personal, queremos conocer de primera mano cuáles son las necesidades de la comunidad, buscar soluciones y establecer prioridades.
